La Corte del Eclipse
Claudia Ramírez Lomelí
Planeta
488
NOTA: Este reseña puede contener SPOILERS, así que si no lo has leído será mejor que no continúes.
Y bueno, después de un par de años por fin tenemos la conclusión de esta trilogía que comenzó con El Príncipe del Sol, de manera general les puedo decir que me gustó, pero creo que pudo haber sido mucho más y pudo haberse ganado las 5 estrellas, no digo que sea malo, pero me faltó un poco, aun así, logró que quedará en shock en algunas escenas.
El tema del tratado con el reino de la Luna sentí que fue alargado de más, es decir, para mi gusto se desarrolló demasiado para que al final no tuviera tanta relevancia; Sí, era necesario que los territorios del sol y la luna comenzaran a convivir, pero pudo haber sido una trama secundaria; sin embargo, la mitad del libro se habló casi solo de eso.
Durante el libro también vemos los efectos que tienen los poderes que obtuvo Elyon sobre ella, y junto a Emil y sus amigos tendrán que buscar la manera de detener dichos efectos, antes de que los mismos poderes lleguen a terminar con la vida de Elyon. Sin embargo, a lo largo de esa búsqueda todos se van enterando de ciertos secretos que rodean el origen de las naciones del sol y la luna.
Una de las cosas que a lo largo de los 3 libros me hacía enojar era la forma en como Marietta trataba a Giana, ¿Quién no deseaba que le pasará lo peor? Pues en este libro si se voló la barda con sus acciones hacia su hija. En verdad sentía la frustración de Gianna al no poder hacer nada o no querer hacer nada por el simple hecho de que era su madre.
Sabíamos que Marietta estaba loca, pero no habíamos visto hasta qué punto lo estaba, y en este caso Claudia me dio lo que quería, pero ¿A qué costo? Sí, quería que Marietta muriera, pero, ¿de esa manera?, ¿Era necesario que fuera a manos de su propia hija?, digamos que el final de ese personaje fue agridulce, sinceramente no quería que fuera Gianna la causante de ese final.
Una de las cosas más impactantes fue el giro que se le dio a la historia de Ezra, quien se encontraba en búsqueda de su padre, pero que al final lo llevó a conocer una verdad un tanto complicada y dura de saber. Sí, sabíamos que su padre estaba de cierta manera relacionada con la rebelión de Lestra, pero todo lo que vino después fue un duro golpe para nosotros como lectores como para los personajes en sí.
Sinceramente, esperaba más muertes en este último libro o al menos más sufrimiento, quería que Claudia nos hiciera llorar como nunca, y claro que lo intentó, pero no siento que lo haya logrado. Digamos que hubo 3 muertes importantes, de las cuales una fue la más impactante por el modo en que se suscitó, y las otras dos solo fueron muertes para intentar darle un fuerte impacto a este libro, pero que para mi gusto no eran necesarios.
En general, si fue un libro entretenido, tuvimos un buen final para todos los personajes, aunque me hubiese gustado tener un poco más del heredero de Lestra, si así le podemos llamar, creo que como un villano más desarrollado pudo haber tenido más impacto, más por lo que él representaba.
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